miércoles, 29 de agosto de 2012

INQUISICIÓN Y POSTMODERNIDAD

Aida Toledo
Educación
Instituto de Estudios Humanísticos
Universidad Rafael Landívar


No hace tanto tiempo, trabajando como profesora de español y literatura en un instituto público, trataba de hacer milagros, para despertar en los estudiantes de la década del 90, los deseos y el gusto por la lectura de la obra literaria. 

Yo estaba segura en aquel entonces, y estoy segura ahora también, que con la literatura de creación, sobre todo cuando escoges buenos escritores y escritoras, que cuidan su lenguaje y hacen de esto un arte, es posible mejorar los discursos, tanto escritos como orales de los adolescentes. El problema era el tipo de lectura que debías escoger para que ellos se interesaran. 

Vivíamos en aquel entonces, los últimos años antes de la firma de la paz, que sucedió en 1996. El instituto en cuestión era uno de jornada vespertina, la población era toda de varones, y los profesores de ese momento, nos encontrábamos con muchos obstáculos para incidir en la vida de los estudiantes en la adquisición de conocimientos. Ya que era evidente que en nuestro instituto se aglutinaban estudiantes de diferentes lugares de la ciudad de Guatemala, pero también con distintas historias de vida. 

Sabíamos que entre ellos teníamos estudiantes que se dedicaban durante la mañana a trabajar, y las tareas que hacían eran de distinta índole, desde trabajos muy informales, hasta otros, que no les permitían estudiar ni poner atención durante las horas de presencia física en el instituto. 

Enseñar el lenguaje a grupos estudiantiles que han perdido el interés por la escritura, porque mucho lo resuelven a nivel oral, se convertía en una lucha diaria. Cuando escribían composiciones, todo el discurso era tan incoherente, que necesitábamos de intérprete para descodificar aquella escritura casi cifrada, fragmentada y entrecortada que los alumnos estilaban. 

A los alumnos no les interesaban los libros de textos obligatorios que usábamos. Las lecturas les parecían aburridas, y en cierta forma yo les daba la razón, porque regularmente se incluyen en estos libros, relatos que nada tienen que ver con sus propias experiencias, además que el lenguaje que usan, dista mucho de ser el que la población juvenil puede entender, y entonces la enseñanza y aprehensión del propio lenguaje, se convierte en un sufrimiento. 

En un momento epifánico, me recordé de una antología de cuentos cortos que Lucrecia Méndez de Penedo había preparado, y que se había publicado en el Ministerio de Cultura de Guatemala. El librito no era caro, pero sí para grupos de estudiantes que tienen que ganarse la vida desde muy pequeños, vendiendo artículos en las calles, ayudando a sus padres en la preparación y venta de comida o haciendo servicio de limpieza, que eran los empleos que conseguían los adolescentes pobres, cuya obligación económica era grande y pesada. 

A través de la bondad de Juan Fernando Cifuentes, que había publicado en el Ministerio el libro preparado por Lucrecia, adquirimos los volúmenes al módico precio de Q3.00. Los compramos en cada clase, y los colocábamos en la biblioteca cada día, donde la bibliotecaria nos los guardaba. 

La metamorfosis que el libro provocó en aquellos adolescentes de distintas edades, me deja pensar ahora, en el impacto que pueden tener algunas lecturas, cuando el profesor de literatura pierde el miedo, de darles a leer historias más cercanas a la realidad del lector o de la lectora. 

Con lentitud empezamos a leer, porque su falta de habilidad en la lectura era tanta, que se hacía cuesta arriba, cualquier intento. Poco a poco sufrieron cambios, de acuerdo a la edad y la madurez. Leíamos en clase, entre todos comentábamos las historias, que a todas luces eran fuertes. Yo lo sabía, pero por instinto y por experiencia, sabía que en algún momento, tendrían que reaccionar ante el nuevo discurso de varios guatemaltecos, donde encontraban historias a veces hasta increíbles, que los atraían como un imán y trataban por distintos medios de terminar de leerlas. 

A la distancia recuerdo los esfuerzos de lectura que tuvieron que hacer, pero su interés creció, cuando fueron mejorando sus habilidades, en contacto con los libros cada día. Y aunque sabían que los libros eran de ellos, no dudaban en dejarlos en la biblioteca, con temor a perderlos, que se los quitaran en la casa, o de olvidarlos en el sitio de trabajo. 

Los ejercicios que hicimos durante esos meses variaban, pero iban paulatinamente escribiendo comentarios personales, luego un poco más críticos, para terminar cambiando los finales de las historias, o los inicios, con lo cual podían digamos “intervenir” la historia, y hacerla distinta. 

Además realizaban ya comprobaciones de lectura, que era imposible cuando iniciamos el año. Hicimos un diccionario de jerga de la época, y pude finalmente comentarles sobre gramática, o aspectos gramaticales que les iban abriendo los ojos en su propia escritura. 

Quizá fuera octubre del mismo año, cuando hice un viaje corto de trabajo. Al volver y pedir los libros, los estudiantes del primer periodo me dijeron: ¿qué libros?, y mi sorpresa fue mayor, cuando me contaron que el subdirector los había mandado a quemar en medio del enorme patio, que en mi memoria, estaba cubierto por tierra. 

No pude ver mi propio rostro, pero sí podía ver las caras de los estudiantes, tristes y acongojados, tratando de darme ánimos ante la situación. Cuando me tocó ir a las otras clases donde usaba el libro, comprobé que habían quemado todos los libros. Habían hecho su “quema del diablo” en octubre, nos habían aplicado la inquisición postmoderna. 

Ahora a la distancia me doy cuenta de algo, pienso que el bien ya estaba hecho. Había logrado despertar en ellos el interés por la lectura, y por conocer valores que se transmiten a través de la literatura de sus propios congéneres. En ese libro habían temas escabrosos, no para el día de hoy, sino para aquel tiempo. Pero los estudiantes de aquella escuela media pública no vivían realidades menos sórdidas, además que aunque tuvieran entre 12 y 15 años, se trataba de estudiantes que tenían una madurez provocada por el trabajo asalariado mal pagado, ayudaba la dureza de sus propias existencias en medio de la pobreza, la violencia y el asedio de las bandas juveniles, denominadas “maras”, que asolaron a la población guatemalteca de la década del 90. 

Hoy en día, la escuela media, tanto pública como privada, se encuentra situada con niveles muy bajos en cuanto a las habilidades en la lectura y su comprensión, y cómo no, pienso, si las autoridades de un instituto público, aplicaron las mismas tácticas inquisitoriales, no sólo conmigo, sino faltándole el respeto a la propiedad privada, ya que con muchos esfuerzos, los estudiantes habían comprado los libros, y respetaban y querían su libro, porque les había costado, y porque lo habían leído, comentado, usado hasta la saciedad, con una profesora que sigue teniendo fe en que la lectura puede hacer cambios en los adolescentes, si se les permite leer con libertad, interpretar, y orientar, no importando que las historias sean parecidas a la vida real de sus lectores.

martes, 28 de agosto de 2012

APUNTES SOBRE LA EDUCACIÓN MEDIA Y SUPERIOR EN GUATEMALA

Aida Toledo
Universidad Rafael Landívar


Diversos estudios caracterizan a Guatemala como uno de los países en los que la desigualdad y la injusticia social están en relación a un largo proceso histórico, cuyas raíces se localizan a inicios de la conquista y el coloniaje español.[1]

Sin embargo en la actualidad, cuando pensamos en la agenda educativa nacional, solemos amarrarla históricamente, a uno de los procesos políticos más cercanos y reconocibles aún por una población que ha sido testigo, o que ha estado inmersa y puede dar fe, de los efectos nocivos que ha tenido en la ciudadanía sometida al terror, la violencia y el abandono del Estado por más de 36 años.[2]

Es indudable que la guerra de contrainsurgencia viene a ser el telón de fondo, de años de abandono en los diferentes renglones de la cultura nacional. La sobrevivencia no ha sido únicamente en cuanto al hambre, el desarraigo o la desterritorialización, sino también en materia de educación, donde obviamente no hubo desarrollo, ni tampoco se invirtió dinero para su mejoramiento, evitando el estancamiento en que la encuentra la década de los Acuerdos de Paz.[3]

A fines de la década de los 90 se han propuesto distintas estrategias y hecho esfuerzos múltiples para incrementar el gasto público en este renglón, pero no se ha logrado establecer un pacto entre gobiernos y sociedad, con el fin de lograr mayor inversión en la calidad educativa, tanto para los hombres como para las mujeres.[4]

Un reciente análisis sobre la equidad en la educación en Guatemala, permite afirmar que a pesar de los avances, el sistema educativo sigue reforzando la desigualdad social que caracteriza al país.[5] Lo que se discute principalmente en ese trabajo es que los grupos más necesitados no están recibiendo el apoyo necesario dentro del sistema escolar, y no logran acumular los años de escolaridad que necesitan para salir de la pobreza que limita el desarrollo de sus familias y por ende el del país como totalidad.[6]

La agenda educativa de Guatemala ha trabajado principalmente en cuanto a la educación primaria, conforme a lo que la Constitución de la República predica como ley, pero lamentablemente se ha descuidado o no se ha puesto suficiente interés en velar por la consecución de la escolaridad en los niveles básico y diversificado, aunque se conoce que existe una ley que protege la asistencia de la población al ciclo básico, pero no así al diversificado. 

De acuerdo a las investigaciones realizadas sobre este tema específico, se requiere que la población logre alcanzar mayores niveles educacionales,[7] sobre todo porque el país, al igual que el resto del mundo tiene como marco el de la globalización, cuya agenda es abrir sus mercados para competir en un mundo donde se necesita un promedio mayor de años de escolarización, y esto apunta también a la educación universitaria.[8]

Conversatorio IEH Landívar en FILGUA 2012
Fotografía por: Zayda Noriega
Un problema serio en todos los niveles educativos en el país parece ser el de la calidad de la educación, ya que diversas investigaciones sobre el tema han revelado a través de los resultados de las pruebas de rendimiento académico, que los estudiantes no están aprendiendo lo necesario para alcanzar los logros esperados.[9]


Estos trabajos han establecido que las causas de esta falta de concreción de metas, está también amarrada a las variables socio-familiares que están limitando los resultados de los grupos principalmente desfavorecidos, sobre todo en las áreas del lenguaje, pero principalmente en las ciencias, como el caso de las matemáticas.[10]

Los estudios revelaron que también se ha procedido a incrementar esfuerzos en los programas de alfabetización,[11] principalmente en el interior del país, y que parte de la agenda está en continuar ampliando los horizontes y fijarse metas sobre la cobertura de la educación básica y diversificada. ¿Qué se ganaría con esta propuesta? Las investigaciones han evidenciado que mientras más escolaridad tengan tanto las niñas como los niños, los jóvenes y los adultos, pensando en la pertinencia cultural, los efectos económicos y sociales se elevarían.[12] Es importante entonces brindar estas oportunidades a quienes han quedado al margen por razones históricas, haciendo no solo un acto de justicia, sino tratando de permitirle al país el desarrollo a través de estos operativos, con el fin de fortalecer la democracia.

El nivel medio, como se le denomina oficialmente a los dos ciclos, tanto básico como diversificado, se realiza en un periodo que va de la entrada a la adolescencia (12-13 años de edad) y termina aproximadamente a los 18-19 años, dependiendo del espacio geográfico en que se inscriban los estudiantes, pero digamos que son los límites temporales oficiales. La situación en Guatemala sigue siendo problemática para la inserción de los estudiantes, sobre todo si pensamos en las clases sociales menos favorecidas, económicamente. Ya que los jóvenes que están en edad de asistir a este ciclo, regularmente tienen la obligación de trabajar media jornada o la jornada completa, para ayudar en sus casas, si no es que lo hacen ya desde los años obligatorios durante la primaria. Entre los sexos, las niñas tienen los niveles más bajos de asistencia y promoción, y más altos en deserción y bajo rendimiento. De acuerdo a la idiosincrasia guatemalteca, son las niñas quienes principalmente dejan la escuela para ayudar en la casa al cuidado de los hermanos menores y las labores del hogar, y luego para trabajar como empleadas domésticas o asalariadas, en otros lugares, aún en una edad escolar.[13]

El ciclo básico se forma regularmente de 3 años, y es obligatoria su asistencia, desde la perspectiva del Estado, durante los años que componen el ciclo. Una de las desventajas que se han observado a nivel de contenidos de enseñanza, es que se recibe una educación demasiado general, y desde los estudios realizados por diversas instituciones alrededor del 2005, una de las recomendaciones era la de revisar el pensum de estudios del ciclo básico, ya que las muestras tomadas entre una población de estudiantes representativa, daba como resultados, en primer lugar un bajo rendimiento en relación a los estándares latinoamericanos,[14] además de la poca profundización en áreas que serán fundamentales para la educación en el ciclo diversificado y posteriormente, para la educación superior o universitaria.

El ciclo diversificado ha dado un viraje en sus intereses educativos. En la década del 70 no existían todas las carreras técnicas que hoy pueden estudiarse, y las escuelas públicas ofrecían un número de carreras que estaban en relación con el mercado de trabajo, al terminar el ciclo diversificado. Las carreras eran: el bachillerato en Ciencias y Letras, el secretariado bilingüe (español-inglés), la carrera de maestro de primaria/a urbano y rural, maestros de pre-primaria urbanas, y el perito contador. Ya se contaba a inicios de los 70 con el Instituto Técnico Vocacional donde se podían sacar carreras que tenían un componente adicional, como el dibujo gráfico o la mecánica automotriz, pero que eran únicamente para los varones, las mujeres quedaban excluidas. 

En la actualidad las escuelas de diversificado promueven la inserción de alguna especialidad, con la cual tendrán mejores oportunidades de triunfar en las distintas carreras superiores que los estudiantes escojan, pero esta opción se ofrece regularmente desde las instituciones privadas, propiciando la exclusión en dos vías, una, si los estudiantes no tienen la capacidad de pagar su colegiatura, y por otro lado, dependiendo de lugar geográfico de dónde procedan, ya que estas escuelas suelen dar servicio únicamente en los cascos urbanos.

Para los dos ciclos sigue siendo problemática la mala calidad de la enseñanza por un lado, la generalidad de la información y saberes que plantean los pensum de las escuelas (tanto públicas como privadas), y una falta de interés por profesionalizar y actualizar a los profesores que componen los claustros de maestros. 

Los cursos ofrecidos por el ciclo básico, suelen ser demasiado generales, en tanto que en el diversificado, hay un interés por la especialización en la actualidad, pero necesitan revisar sus pensum, analizarlos, e intentar la reforma educativa, en un nivel que está siendo manejado principalmente desde la iniciativa privada. Por otro lado hace falta contratar cada vez más a profesionales de la enseñanza que reciban actualizaciones constantes, a nivel de talleres o cursos, con los cuales puedan ofrecer una enseñanza de mejor calidad, para los estudiantes tanto de las escuelas públicas como privadas. Se hace necesario trabajar más en cuanto a estrategias de enseñanza, y formas nuevas de participación pedagógica, con el fin de mejorar su propia enseñanza, buscando una mayor promoción calificada.

Uno de los esfuerzos por ayudar a los padres y alumnos, para que los segundos avancen en sus estudios, han sido los programas de becas que fortalecen la inserción de los estudiantes en la edad requerida.[15]

Hay algo que ha cambiado radicalmente en el pensamiento del sujeto de la era global respecto a la educación, elemento que debiera de ser tema de reflexión dentro de la organización y administración de las escuelas del Estado y de las escuelas privadas, en cuanto que el nuevo sujeto (hombre o mujer) que asiste tanto al ciclo básico como al diversificado, no tiene únicamente el interés de graduarse y dedicarse a buscar un trabajo al finalizar este periodo de su vida. El sujeto de hoy, no importando que sea de áreas rurales, lejanas o cercanas a los centros urbanos, tiene una consciencia desarrollada acerca de la educación superior, que no tenían las generaciones que nacieron durante las primeras 4 décadas del siglo XX. Actualmente se conciben los estudios básicos y diversificados como un trampolín de saberes e información, con los cuales defenderse en la carrera universitaria que se escoja. Los alumnos que asisten a las escuelas del Estado, tanto en la capital, como en otras áreas urbanas dentro del interior del país, saben que esa educación es fundamental para el éxito o fracaso en la educación superior. Habría que comprobar si los estudiantes de áreas alejadas de los centros urbanos, tienen esa consciencia desarrollada o no, y si no la tienen, ¿por qué sucede esto? Es muy posible que una de las causas esté en relación a la precariedad de su propia vida, a observarse atrapados dentro de un círculo vicioso, en el cual el único camino a seguir sea el de participar como sujetos de trabajo. Sin embargo es necesario saber hasta dónde existe esta consciencia. 

La educación universitaria o superior en Guatemala tiene varios rostros. Se trata de una educación que cuando es privada, desea mantener un nivel educativo de alto rendimiento. Además vigila porque el nivel educativo de sus profesores sea bueno, si no excelente. Algunas de las universidades privadas ofrecen becas para estudiantes que las necesiten, ya que las matrículas suelen ser altas. Sin embargo quienes ofrecen este tipo de ayudas becarias, como la Universidad Rafael Landívar o la Universidad del Valle, también establecen requisitos para otorgarlas, y uno de ellos es el nivel académico de los aplicantes. 

La única universidad estatal es la Universidad de San Carlos, cuyas cuotas le permiten a las clases más desfavorecidas, económicamente, poder estudiar alguna de las distintas carreras que se ofrecen desde hace muchísimos años. Sin embargo en la actualidad, dentro de su agenda de políticas educativas, ha instaurado una serie de requisitos y exámenes generales de ingreso, que hacen que el estudiante con deficiencias en matemáticas, lenguaje, escritura y lectura, para mencionar algunas áreas digamos generales, puedan acceder a alguna carrera universitaria. Y este es un grave problema que nos regresa a la necesidad de revisar, analizar y evaluar los programas y pensum de los ciclos básico y diversificado, con el propósito de pensar en estrategias educativas y pedagógicas que puedan beneficiar a los grupos que económicamente no pueden sufragar la educación superior privada, y hoy en día tampoco la educación superior pública, ya que no poseen el nivel de información y saberes, que la USAC está requiriendo en la actualidad. 

Se hace necesario entonces hacer una investigación en varias vías. Una en cuanto a la calidad de la enseñanza que se ofrece desde las escuelas, tanto del Estado como privadas, en los ciclos básico y diversificado, en las áreas urbanas, pero principalmente en áreas en donde se inscriben estudiantes, que vienen del área rural hacia los centros urbanos, que es donde se encuentran instaladas las escuelas, tanto públicas como privadas. En este sentido podría evaluarse si se ha incrementado la inversión en educación de parte del Estado en este nivel, o si sigue siendo el mismo que se muestra en el trabajo de Porta y Laguna.[16]

Revisar el material que los docentes están trabajando con los estudiantes, desde los programas de estudio, y que son propuestas del Ministerio de Educación, para establecer y evaluar cuáles son los cambios que la administración de las escuelas privadas proveen a los estudiantes, y en cuáles áreas del saber, la población que no tiene dinero para pagar estos colegios, está siendo excluida, y estará en desventaja a la hora de querer insertarse en la USAC, o de aplicar a alguna de las becas que ofrecen las instituciones privadas de educación superior.

Una tercera indagación podría estar en la preparación del personal docente.[17] De acuerdo a los requisitos del Ministerio de Educación, los profesores contratados deben estar graduados de PEM en su especialidad, o en su defecto tener un porcentaje alto de cursos aprobados en la carrera de su especialización. Sin embargo se sabe de manera no oficial, que las instituciones privadas suelen contratar personal no calificado, al que le pueden pagar sueldos menores, si les comprueban la ausencia de título universitario PEM, o si no pueden presentar pruebas de que están llevando la carrera ya de forma avanzada . Si esto no sucede con las instituciones públicas, cuál es la incidencia del mismo factor. 

Un resultado importante de la investigación tendría que estar vinculado con las estrategias educativas que se despliegan en el país, tanto en la educación pública como desde el sector privado, en cuanto a la planificación de los ciclos que van desde el nivel medio hacia el nivel superior.


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BIBLIOGRAFÍA


  • Arenas, Luis Edgar. Becas de Educación Media en Guatemala.
  • “Guerra civil en Guatemala”. Informe de la Comisión para el esclarecimiento histórico. El Latinoamericano. www.ellatinoamericano.cjb.net
  • “La Educación en Guatemala”. Centroamérica. http://mazariegoslam.blogspot.es/1210624740
  • Montenegro, Nineth. El desafío de la participación política de la mujer en Guatemala. 1-95. Es.scribb.com/doc/36085908/El-desafio-de-la-participacion-politica-en-Guatemala-Nineth-Montenegro, 86.
  • Picardo Joao, Oscar. Educación y realidad: introducción a la filosofía del aprendizaje. Vol.3. San José, Costa Rica: . Coordinación Educativa y Cultural Centroamericana (CECC/SICA), 2008, 132.
  • Porta Pallais, Emilio y José Ramón Laguna. Equidad de la educación en Guatemala. Serie de Investigaciones Educativas. Vol. 4. Guatemala: USAID/AED/Guatemala. Diálogo para la Inversión Social en Guatemala, 2007, 3.
  • Red Latina sin Fronteras. 2 de octubre, 2008. Red-latina-sin-fronteras.lacoctelera.net/post/2008/10/02/desde-mayas-hasta-insurgencia-guatemala


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[1][1] “Desde los mayas hasta la insurgencia en Guatemala”. Red Latina sin Fronteras. 2 de octubre, 2008. Red-latina-sin-fronteras.lacoctelera.net/post/2008/10/02/desde-mayas-hasta-insurgencia-guatemala


[2] La CEH apoyándose en la investigación concluye que el incremento del gasto militar que se produjo durante el enfrentamiento armado desvió las necesarias inversiones en salud y educación como destino de los recursos públicos, con el consiguiente abandono de la atención al desarrollo social. Esto aceleró el deterioro de las condiciones de salud y educación en las áreas más afectadas por el conflicto. “Guerra civil en Guatemala”. Informe de la Comisión para el esclarecimiento histórico. El Latinoamericano. www.ellatinoamericano.cjb.net


[3] Guatemala ha tenido históricamente un nivel muy desfavorable en el campo de la educación. El nivel de escolaridad en Guatemala es bastante bajo, el INE estima que el promedio es de solo 2.3 años. Incluso menor en los lugares mayoritariamente indígenas, 1.3 años. Los Acuerdos de Paz y el Plan Nacional de Desarrollo 1996-2000, plantean la necesidad de reducir el déficit de cobertura, especialmente en los niveles de pre primaria y primaria, con énfasis en el área rural y en la educación de las niñas. “La Educación en Guatemala”. Centroamérica. http://mazariegoslam.blogspot.es/1210624740


[4] Los indicadores educativos de la matrícula educativa hacia 1997, reportaban datos en distintos países de Latinoamérica con niveles inferiores para las niñas, oscilando en un 51% para el sexo masculino y un 49% para el sexo femenino, cuando los porcentajes demográficos indicaban una relación inversamente proporcional. Oscar Picardo Joao. Educación y realidad: introducción a la filosofía del aprendizaje. Vol.3. San José, Costa Rica: . Coordinación Educativa y Cultural Centroamericana (CECC/SICA), 2008, 132.


[5] La investigación establece que en el momento, el sistema guatemalteco educativo ayuda a replicar y hace perdurar el patrón de desigualdad que caracteriza al país. Emilio Porta Pallais y José Ramón Laguna. Equidad de la educación en Guatemala. Serie de Investigaciones Educativas. Vol. 4. Guatemala: USAID/AED/Guatemala. Diálogo para la Inversión Social en Guatemala, 2007, 3.


[6] Los estudios muestran que Guatemala no sólo se distingue por tener una distribución inequitativa de los ingresos, sino que también por tener la distribución más desigual en educación. Las gráficas en este trabajo evidencian que es el área rural la más desprotegida y Alta Verapaz el departamento con mayor nivel de ruralidad y porcentaje de niños y niñas fuera del sistema educativo. Equidad,…10. 


[7] El análisis realizado por Porta y Lagunas deja ver que el analfabetismo es la consecuencia más clara de la falta de acceso a la educación. Equidad, 14.


[8] “La arquitectura social actual está configurada por la globalidad, lo que implica la definición de una nueva sociología –o hipersociología- pautada por los flojos del conocimiento, de los aprendizajes y de las nuevas tecnologías: en segundo lugar, la Educación –y una educación de calidad- es el criterio principal para no naufragar en la vorágine de cambios que vivimos en los albores del siglo XXI”. Oscar Picardo Joao. Educación y realidad: introducción a la filosofía del aprendizaje. Vol.3. San José, Costa Rica: . Coordinación Educativa y Cultural Centroamericana (CECC/SICA), 2008. 


[9] Los resultados de las pruebas de rendimiento académico después del 2007 revelaron que los estudiantes del país no están aprendiendo lo necesario para alcanzar los criterios de logros esperados. Porta Pallais y Laguna. Equidad de la Educación en Guatemala, 31.


[10] Equidad de la Educación en Guatemala, 31.


[11] La tasa de alfabetización en Guatemala en el censo del año 2002 establece que estamos en el puesto 168. Los datos en ese momento eran para una población que rebasaba los 15 años y podía leer y escribir. La población total tomada era del 69%, hombres 75.4% y mujeres el 63.3%. www.indexmundi.com/es/guatemala/tasa_de_alfabetizacion.html


[12] Respecto al porcentaje en escolaridad, en el estudio de Porta y Laguna es posible observar que Guatemala acumula frente a otros países un 30% de personas sin instrucción, lo cual pone de manifiesto que la mano de obra en este país enfrenta una significativa desventaja y un alto grado de vulnerabilidad para competir ante la actual apertura de los mercados del mundo externo. Equidad, 16. 


[13] La situación de la niña guatemalteca también es precaria. En el ámbito educativo, el nivel de deserción escolar alcanza al 81 por ciento en el área rural y al 51 en la urbana. Tan sólo 17 de cada cien niñas completa la educación primaria y en zonas rurales el 66 por ciento de ellas abandona la escuela antes de concluir el tercer grado. Nineth Montenegro. El desafío de la participación política de la mujer en Guatemala. 1-95. Es.scribb.com/doc/36085908/El-desafio-de-la-participacion-politica-en-Guatemala-Nineth-Montenegro, 86. 


[14] Según lo estimado por Porta y Laguna alrededor de 2006, Guatemala resulta ser el país donde se observa el mayor porcentaje de repetición escolar en primaria. Y que las brechas entre géneros y población según área de residencia se han mantenido constantes en detrimento de las niñas y de personas que habitan áreas rurales. Equidad, 19.


[15] Las entidades que ofrecen becas tanto desde el Estado como de lo privado son: MINEDUC, ENCA, SOSEP; desde la iniciativa privada: Banco de los Trabajadores, CAG, CAS, ITEC-UVG, PROESUR-UVG, BCM, entre otros. Luis Edgar Arenas. Becas de Educación Media en Guatemala, 1.


[16] La gráfica realizada por Porta y Laguna para la inversión que se hacía en 2006 en el nivel medio, nos muestra que en ese momento acusaba una tendencia claramente regresiva, beneficiando en mayor medida a los estratos socioeconómicos con mayores ingresos. Patrón que de acuerdo al estudio, era una práctica en toda Centroamérica. Equidad, 32.


[17] “Los profesores para el nivel pre primario y primario, adquieren titulación de nivel medio (ciclo diversificado). El profesorado del nivel Medio y de Educación Especial adquiere titulación de nivel superior (con especialización). Organización y estructura de la formación docente en Iberoamérica. Guatemala. Perfil docente. , 2.

sábado, 18 de agosto de 2012

IEH visita el campus de Cobán


Sergio Mendizábal, director del instituto, junto con Magda García, investigadora de la línea de sociología de la comunicación y Lucrecia García, investigadora asociada, realizaron un viaje al Campus Regional San Pedro Claver, S.J. de la Verapaz la última semana de julio. La visita sirvió como un primer acercamiento entre directores y coordinadores.

Magda García llevó a cabo una serie de entrevistas con el personal de la Facultad de Humanidades y la Facultad de Ciencias Políticas. Asimismo, conversó con el padre Jesús Tapuerca para conocer aspectos de la juventud en el campus y discutir el tratamiento de la interculturalidad en el lugar.


Este acercamiento y el trabajo realizado en la visita servirán como insumos iniciales para los proyectos que se desarrollarán en el IEH.

jueves, 16 de agosto de 2012

Presentación de avances desde la línea de investigación: Educándonos en la Acción Social


XVII Encuentro Nacional de Investigación Educativa,  
Universidad Rafael Landívar,  2 de agosto del 2012
Ligia Díaz Pentzke, M.Ed.


En el marco del proyecto “Mejoramiento de las condiciones académicas y técnicas en que se llevan a cabo los procesos de formación inicial de docentes para atender la Educación Inicial y la Educación Primaria” hemos venido trabajando con maestros de tres departamentos del país, Comitancillo, San Marcos; San Pedro Soloma, Huehuetenango y Cahabón, Alta Verapaz. 


Partiendo de la reflexión, Guatemala al igual que la inmensa mayoría de los países son plurilingües y que el plurilingüismo es la norma, no la excepción ;
entendiendo por diversas fuentes que los niños indígenas tienen dificultad para adaptarse a una escuela donde predomina otro idioma que no es el que ellos traen de su hogar; 
recordando que la lengua “independientemente de su desarrollo o institucionalización, es un fenómeno a la vez humano y social, un sistema primario de signos, instrumento del pensamiento y de la acción y el medio más importante de comunicación.” .
entendiendo que la “educación debe diseñarse para fortalecer el respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales y al pleno desarrollo de la dignidad y el potencial humano” 


Hemos decidido desde el IEH centrarnos  en que los maestros desarrollen capacidades investigativas críticas sobre sus propias prácticas y realidades (algo que es llamado por algunos autores como ciencia civil, debido a que se trabaja con personas que tradicionalmente no investigan y que parte de la idea que todos podemos crear conocimiento). El objetivo es que,  mirando a su cultura en la cotidianidad, revaloren su identidad y la de sus alumnos con el fin último que este trabajo sirva de insumo a la reflexión y al quehacer de la escuela en regiones predominantemente indígenas. Mi posición como coordinadora es más de facilitadora de la investigación que de conductora de la misma . En cada taller, se han invitado profesores de la Universidad Rafael Landívar que desde distintas disciplinas, realizan investigación con comunidades indígenas para de esta forma impregnar la discusión de una dosis de transdisciplinaridad. 

A seis meses de trabajo, en el tema de patrones de crianza, padres, madres, abuelos y abuelas opinan que la educación tradicional corrige y educa mientras que la actual, no forma. Un maestro de Huehuetenango opina: “los abuelos criaron a nuestros padres con algo más de rigor (…), los corregían pegándoles con varas cuando éstos se portaban mal, y por eso los niños de antes  tenían un poco más de respeto”.  Hemos tenido varias sesiones acerca de la dicotomía entre lo que llaman educación tradicional y educación moderna con el fin de encontrar el punto medio donde la educación de los hijos promueva el respeto sin violencia. Ya han encontrado padres de familia que hablan del tema y opinan que la “violencia crea más violencia y no genera confianza” (Don Faustino), pero todavía quedan muchos diálogos pendientes entorno al tema. Los maestros también están preocupados por la falta de responsabilidad de los padres de familia, creen que muchos pretenden dejar toda la carga de la crianza en otros, y nos preocupa aun más, que algunos maestros no deseen la cercanía con los padres de familia ni su opinión pues “los padres todo lo tergiversan” (maestro de Cahabón). 

Hemos aprendido a través de las entrevistas y conversaciones que para los padres de familia la educación está basada en la interacción, es concreta, y se da “a través de enseñanzas y prácticas de consejos continuos y constantes” (frase de Doña Isabel de Comitancillo). Doña Isabel de 45 años nos dice: “Todo lo que hay a tu alrededor tiene sentido y es necesario aprender a escucharlo para poder interpretarlo”. El cómo los niños y niñas indígenas están acostumbrados a aprender (en el campo, usando los cinco sentidos todo el tiempo) no está en contradicción con el modelo pedagógico llamado activo o socioconstructivista.   Sin embargo, el contexto social que apoya el desarrollo del niño va más allá de las interacciones interpersonales del niño/a. Las instituciones, normas y prácticas desarrolladas y apropiadas por previas generaciones juegan un papel importante.  Con respecto a esto Dewey, expandió la idea al decir que: “no nacemos con valores comunes, los construimos (…) por eso los niños deben de ser motivados a comunicarse, a buscar, a investigar para así construir conocimientos y valores en conjunto. Una cultura transmite sus valores proveyendo a sus jóvenes con el tipo de experiencia que hace esos valores reales y significativos para sus propias vidas” (Noddings, 1998, p. 34).

Por esta razón, los maestros y maestra también están observando las prácticas religiosas de su comunidad. Todos han descubierto una historia de dolor al hablar con los abuelos, las abuelas y guías espirituales de la comunidad.  Los abuelos dicen: las prácticas y las costumbres se perdieron como el “Rezo a la Hora”. Sin embargo “en nuestros días, la Iglesia Católica (y quizá otras iglesias) tratan de hacer conciencia en las personas para que no dejen de creer en lo que son y en sus orígenes. Las imágenes en una Iglesia por lo general portan el traje que identifica a la gente” (maestro de San Pedro Soloma).  Los maestros están descubriendo y reflexionando sobre su propia realidad mestiza, pues el creerse puramente indígenas les daba orgullo. Con respecto a esta fusión de identidad, costumbres y religiones, un maestro de San Pedro Soloma concluye: “Eso quiere decir que todo con el tiempo se fusiona”.
Un aspecto importante es que hemos constatado que la solidaridad dentro y fuera de la familia está viva y que es una forma de sobrevivencia para enfrentar problemas económicos, de violencia e inseguridad que se viven cotidianamente. En Comitancillo, hay redes de interdependencia y solidaridad establecidas, de forma que una junta de padres de familia vigila las calles para evitar la delincuencia. En Cahabón se rotan para ayudar a vecinos en la siembra.

Con respecto a la salud, los abuelos cuentan cómo era más fácil curarse en tiempos pasados con el uso de plantas medicinales porque ahora “todo hay que comprarlo”. También manifiestan que sus hijos y nietos no ven la necesidad de aprender acerca del tema. Los maestros ya están por eso tratando de revivir los huertos escolares y de incorporar a abuelos, abuelas y padres de familia en conversaciones acerca del uso de las plantas. 

Al hablar del papel de la mujer, hablan también de la tierra; para las comunidades ambas “nos protegen, nos dan la vida y nos enseñan diariamente” (Dona Victoria, 52 años, Comitancillo). De allí el respeto a la tierra. La maestra de Comitancillo lo expresa así: “el respeto a ella se convierte en una actitud sagrada de orden comunitario”. Los maestros dialogan acerca de cómo entonces enseñar en ciencias acerca de los “objetos sin vida” que hay en la naturaleza, cuando desde la cosmovisión maya, todo tiene vida.

En cuanto a metodología, los maestros investigadores han aprendido que a nivel de aldea o comunidad muy pocas entrevistas se pueden realizar formalmente (a como estamos acostumbrado desde la academia). El tener una grabadora y un cuaderno, aleja al investigador de la persona a la que desea conocer y entrevistar. Los maestros han optado en muchas ocasiones por conversaciones mientras acompañan al abuelo, padre o madre de familia en el camino a su casa. Igual en las asambleas con varios padres de familia, los padres escuchan pero no opinan. Cuando quieren consultar algo, lo hacen en privado. 

Está en proceso y en discusión: 

Los maestros están todavía reflexionando acerca de las enseñanzas de los antepasados, usando la pregunta: ¿qué es lo que hemos olvidado en la Educación de hoy que vale la pena recuperar?
Explorar que quieren y desean los padres, madres y jóvenes que la escuela enseñe y reflexionar con ellos acerca de cómo a través de la educación piensan transformar sus vidas. Es decir falta aun más entrar en un diálogo informado con estudiantes y padres de familia para que la educación sea más pertinente para ellos y sus comunidades sin olvidar de conectar constantemente esa realidad local con la de otras comunidades y municipalidades, y el resto del país. Incluso no privar a estas comunidades de los procesos educativos en otros países con condiciones similares a la de ellos. A como explica Aldana (1997) no se debe obviar lo local, lo regional, lo nacional y eventualmente ni los acontecimientos mundiales que nos afectan.
Partiendo de que la complejidad (lo Maya y no Maya) está en cada familia y que la interacción intercultural se vive cada día, hemos instado a los maestros a preguntarse:
¿Qué tengo de Maya que no sé que tengo?
¿Qué tengo de Occidental que digo que no soy? 
¿En cuáles aspectos estamos ya integrados?


Propuestas y retos

La educación debe ser más vivencial. Sería interesante, hacer investigación con los estudiantes, ir construyendo con ellos el conocimiento sobre su cultura, tomando en cuenta sus curiosidades y preguntas. Los niños presentan y anuncian sus curiosidades desde que tienen meses de edad y los adultos no ponemos suficiente atención.
Para abordar el problema de la lectura, hemos conversado acerca de la posibilidad de que los maestros vayan creando con sus estudiantes historias que se conviertan en libros (escritos, editados y decorados por ellos). Las historias pueden resaltar los valores, las costumbres y creencias que se quieren rescatar de la comunidad. 
Es importante que maestros interioricen que educar no es sólo prepararnos para ser útiles en la sociedad, sino también, prepararnos para hacer aportes a una sociedad que no responde a nuestras necesidades y que no nos es útil como seres humanos. 
A pesar que los maestros saben definir que es Educación Bilingüe Intercultural a través de cuestionarios, no estamos todavía seguros que pueden implementarla y superar los obstáculos que están enfrentando:

o Algunos maestros opinan que los padres de familia piensan diferente a ellos (en cuanto a temas como el castigo y educación sexual y reproductiva), y prefieren no dialogar con ellos. Algunos maestros opinan: “la escuela forma y en la casa se deforma” (Alta Verapaz).
o Los niños no llegan todos los días, porque “los lunes es día de mercado” (Comitancillo) puesto que la necesidad económica sigue siendo apremiante: los padres y madres sólo esperan que el niño aprenda a sumar y restar para que empiece a trabajar y retirarlo de la escuela. 
o Ninguno de los maestros entrevistados al momento piensa que la educación sirve para reflexionar, criticar lo dado tanto por los textos como por la sociedad en general (Alta Verapaz). 
o Para empezar a romper la barrera entre escuela y comunidad, se ha hablado de la posibilidad de invitar a madres, abuelos y abuelas a compartir sus conocimientos, tomarlos en cuenta como actores, no solamente para preparar la refacción como se piensa desde algunas escuelas. Un maestro de Cahabón ya ha logrado formar un Consejo de Abuelos en la escuela. 

Considero que el avance más importante de este proyecto de investigación es el desarrollo de capacidades investigativas y reflexivas en maestros que tienen muy pocas oportunidades para realizar investigación. Será interesante ver si al final los maestros miran la educación como una herramienta para transformar la vida y el entorno, no sólo para “caber en la sociedad” a como está dada. Está por verse como decidirán hacer adecuaciones al currículo en mano para darle cabida  a la cosmovisión Maya. No menos importante es el acercamiento que estos maestros están logrando a su comunidad, valores, tradiciones y creencias para conocer mejor las habilidades y problemáticas con la que sus niños llegan al aula. En términos de crecimiento epistémico, considero que si damos un salto de pensar en términos dicotómicos (o soy Maya o soy Occidental, por ejemplo) a pensar en la complejidad de lo que somos y de la realidad en que vivimos, estaremos obteniendo grandes resultados. Esto queda por verse en los próximos tres meses. 


Bibliografía
Aldana, Carlos (1993). Pedagogía General Crítica (Tomo I). Serviprensa Centroamericana. Guatemala
Barnach-Calbó (2004), La nueva educación indígena en Iberoamérica.  Revista Iberoamericana de Educación, Número 13, Organización de Estados Iberoamericanos Para la Educación, la Ciencia y la Cultura.  Acceso: http://www.oei.es/oeivirt/rie13a01.htm el 30/07/2012
Noddings, Nel (1998). Philosophy of Education. Westview Press

Palmieri, M. y Hernán L. Delgado (2011). Análisis situacional de la malnutrición en Guatemala: sus causas y abordaje. PNUD. Guatemala 

Secretaría de seguridad alimentaria y nutricional, Consejo Nacional de Seguridad Alimentaria y Nutricional (CONASAN), Gobierno de Guatemala (2009). Plan estratégico de seguridad alimentaria y nutricional (pesan 2009‐2012). Guatemala. Acceso el 30/07/2012: http://www.fao.org/righttofood/inaction/countrylist/Guatemala/PlanEstrategicodeSeguridadAlimentaria09-12.pdf

Sistematizaciones de encuentros con maestros investigadores y entrevistas a padres, madres, abuelos y estudiantes.

Páginas virtuales:
www.unfpa.org


Tráfico Ilegal versus Consumo Legal

Ligia Díaz Pentzke


Legal o Ilegal, el tráfico y consumo de drogas debe discutirse en nuestra región. No es un asunto de estado solamente, es un problema que acecha a las grandes urbes y a las poblaciones más pequeñas de nuestra Centro América.

Es muy interesante y apropiado el artículo de Juan Carlos Hidalgo retomado en CentralAmérica Data[1] acerca de la discusión de la despenalización de la droga. Y para dar un ejemplo de la vida cotidiana cito un breve testimonio a nivel de comunidad de cómo la droga está afectando a las escuelas. Hace unos dos meses, una maestra de Comitancillo, San Marcos, Departamento de Guatemala, nos hablaba de su preocupación por la falta de valores y terminó contando como los padres de familia de aldeas distantes prefieren no enviar a sus hijos a la escuela pues consideran que allí van a aprender a ser narcotraficantes o consumidores de droga ilícita. Los padres opinan que mejor están al lado de ellos en la milpa que en la escuela. Si bien antes creíamos que los padres no enviaban a sus hijos por “no querer”, “para usarlos como fuerza de trabajo”, ahora los padres tienen temores reales y entienden que al mantenerlos al margen de las escuelas y las ciudades, mantienen a sus hijos libres de peligro.

A continuación el artículo para despertar la discusión.

Según datos recogidos por Hidalgo, "la prohibición de las drogas ha hecho del narcotráfico un negocio extremadamente lucrativo. Esto se debe a que el precio de una sustancia ilegal se determina más por el costo de la distribución que por el costo de la producción. Por ejemplo, en el caso de la cocaína, el precio de la hoja de coca en el campo y lo que paga un consumidor en las calles estadounidenses por el polvo blanco aumenta en más 100 veces. Dependiendo de la droga, el 90% o más del precio minorista del estupefaciente corresponde a la prima generada por la prohibición. Por esta razón, los márgenes de ganancia de los carteles de la droga son enormes. Según cifras de las Naciones Unidas, el comercio mundial de estupefacientes alcanza los $320.000 millones al año”.

El artículo continúa explicando que "a pesar del claro fracaso de la prohibición, muchos malentendidos abundan sobre la legalización de las drogas. Por lo tanto, es importante enmarcar el debate dejando claro lo siguiente:

 •Primero. La legalización no implica aprobar o incentivar el consumo de drogas. El consumo de estupefacientes es una realidad histórica de la humanidad con la que debemos aprender a convivir.

 •Segundo. Hay una diferencia muy importante entre consumo de drogas y el abuso de ellas, tal y como existe una enorme diferencia entre consumo de alcohol y alcoholismo. No todo consumo de drogas se convierte en drogadicción.

•Tercero. También existe una diferencia crítica entre las consecuencias negativas de la drogadicción – como la desintegración familiar, problemas de salud, pérdida de productividad, etc.– y las consecuencias negativas de la prohibición de las drogas, tales como el crimen, la violencia, la corrupción y altos niveles de mortalidad por consumo. Mucha gente, al argumentar contra la legalización, trae a colación imágenes de violencia y crimen, cuando en realidad estos son flagelos causados por la prohibición y más bien disminuirían significativamente una vez que el mercado negro de las drogas desaparezca con la legalización.

•Finalmente, es importante aclarar que la legalización no pretende resolver el problema de la drogadicción ni los males sociales asociados a este fenómeno, los cuales es mejor abordar desde un enfoque de salud pública y no criminal. Lo que la legalización pretende es eliminar los efectos negativos de la prohibición antes señalados."

Yo agregaría la idea de ¿cuánto recaudaría un gobierno si pudiese tasar este tipo de negocio? ¿Cuánto más podría crecer la inversión en salud y educación pública y las medidas preventivas dirigidas a la juventud para evitar su decadencia? ¿Cuánto más podría invertir un gobierno en carreteras que unan a las comunidades a las escuelas y mercados necesarios para que la gente salga adelante?

En discusión también está el tipo de legalización que debería aplicarse. Algunos opinan que basado en los principios de libertad y derecho de cada quien a elegir la vida que quiera vivir, se debería optar por la legalización total, que eliminaría completamente todas las formas de control gubernamental. Basado en principios éticos, se tiende a optar por formas de legalización regulada donde las drogas estarían legalmente disponibles bajo un sistema de control del gobierno lo que implica:

Etiquetado legal sobre dosis y advertencias médicas
Restricciones a la publicidad
Limitaciones de edad
Restricciones en la cantidad comprada en un tiempo
Requisitos sobre la forma en que ciertas drogas que se deban suministrar
Prohibición de venta a personas ebrias
Licencias de usuario especial para comprar drogas

El sistema de legalización regulado probablemente tendría una serie de restricciones para las diferentes drogas, según la percepción de su riesgo, así que mientras algunos medicamentos se venden sin receta en las farmacias u otros establecimientos autorizados, las drogas con mayor riesgo de daño sólo podrían estar disponibles para la venta en instalaciones autorizadas donde su uso pueda ser controlado y cuidado por un médico de emergencia siempre disponible. Ejemplos de fármacos con diferentes niveles de distribución regulada en la mayoría de países son: los antibióticos, la nicotina (tabaco), y el alcohol etanol (cerveza, vino, licores).

El alcohol, que en un tiempo fue ilegal, ahora es legal y aunque el alcoholismo es alto en Centro América, se debe más bien a los males sociales que la acechan (la pobreza, la desigualdad, la falta de trabajo y oportunidades de jóvenes para educarse, por mencionar unos pocos) que a la legalidad del producto. Preguntas de cierre: con la prohibición, ¿Hemos logrado disminuir el número de consumidores?[2] ¿No traería a largo plazo más frutos el poner los esfuerzos en la formación de jóvenes y ofertas de trabajo viables para ellos, que el acabar nuestros recursos y gente en la guerra contra las bandas de traficantes ilegales? Dejo abierta la discusión.

_________________________________________________________________________________

[1] http://www.centralamericadata.com/es/article/main/Fracaso_de_la_guerra_contra_el_narcotrfico?u=3a624b94e917752e7371f2c2023616a3&s=n&e=2&mid=[MESSAGEID]


[2] En EE.UU. los mayores de 12 años que consumen drogas aumentaron de 5.8% en 1991-93 a 8.9% en el 2008. En México la guerra contra las drogas causó la muerte de más de 50,000 personas en los últimos 5 años. http://www.centralamericadata.com/es/article/main/Fracaso_de_la_guerra_contra_el_narcotrfico?u=3a624b94e917752e7371f2c2023616a3&s=n&e=2&mid=[MESSAGEID]

domingo, 12 de agosto de 2012

Conversatorio sobre Educación Media: discusiones actuales y reflexiones


Educación
Victoria González G.

El conversatorio sobre Educación Media realizado en la URL el pasado 8 de agosto, organizado desde el Instituto de Estudios Humanísticos, contó con la participación de Bienvenido Argueta y Virgilio Álvarez, y arrojó diferentes puntos de vista, acerca de la reforma educativa que el Ministerio de Educación plantea implementar para el próximo año, y que afecta directamente a los normalistas. 

Según lo mencionan los expertos, ya desde finales del siglo XVIII el doctor Antonio Liendo y Goicochea, propone reformas a la educación universitaria. A partir de la firma de los Acuerdos de Paz en 1996, son diversos los sectores –magisterial, sindical, estatal- interesados en realizar una reforma al sistema educativo nacional. 

De acuerdo con Bienvenido Argueta, un problema existente es que a los cambios realizados, previos a esta reforma educativa, o en función de establecer las bases para la misma, se ha cometido el error de denominar “reformas” a las acciones que innovan –en esta fase- el desarrollo de un proceso preliminar en dicha materia. El planteamiento, no es una transformación real y elemental del sistema educativo nacional, cuando la población no tiene otras necesidades importantes cubiertas. 

Virgilio Álvarez afirma por su parte, que la escuela, como institución, debe ser un espacio donde se forme a la persona para un trabajo adecuado, que le permita retribuir a través de éste una mejoría y calidad de vida. Deben comprometerse varios actores para que la reforma educativa efectivamente funcione; el interés de propiciar esa solidaridad entre sectores es responsabilidad pública, así como el fomento del pago de los impuestos para que en conjunto se posibilite y se brinde la educación como un derecho. 

Esta reforma podrá concretarse, según los panelistas, cuando los guatemaltecos sepamos qué país queremos, cuando haya una propuesta eficaz que permita a los actores beneficiarse realmente por la propuesta. Para ello, debe existir el liderazgo necesario de una elite (entendida como un sector que reconozca las necesidades y acciones necesarias para el proceso) que esté dispuesta a hacer cambios para que se logre, bajo el consenso de la población, la transformación de la educación en nuestro país. 

Bajo esta perspectiva, la reforma y los cambios que se realicen, serán duraderos sólo si se hacen en democracia, no en la oscuridad –bajo el auspicio de sectores minoritarios interesados en el beneficio propio-, y la sociedad con pleno conocimiento de aquellos problemas que le atañen directamente. 

La reforma, no responde a una necesidad efectiva de la población guatemalteca, porque se desconoce cuáles son las prioridades de acción en esta materia. Según los panelistas, el proceso llevará su tiempo, porque está relacionado con diferentes reformas legales donde no existen planes para ser modificadas, tales como: la Ley de Escalafón del Magisterio, la Ley de Educación Nacional –que ni siquiera cuenta con un reglamento-, la ley de las universidades, tanto pública como privadas, entre otras. 

Según lo afirman los expositores, así como algunos de los estudiantes que participaron en el conversatorio, la propuesta de la reforma no surge de un ideario político, consensuado con la sociedad civil y demás sectores afectados. Por supuesto que es una propuesta retomada por algunos de ellos, pero la población no se ha apropiado de ella. Según los jóvenes, existe un claro interés de parte de las autoridades educativas, en desinformar a los estudiantes afectados por la transformación; esto propicia evidentemente una desapropiación de la propuesta por parte de este sector. Aún así, se observa que existen comunidades educativas, tal es el caso de la del departamento de Chiquimula, en donde estudiantes, padres de familia y profesores, se han apropiado de la reforma y han realizado diversas propuestas a las autoridades del Ministerio de Educación. 

En conclusión, la educación media en Guatemala atraviesa por un proceso de cambios, tanto de fondo como de forma, que deben ser consensuados con la población guatemalteca para que sea efectiva a todo nivel, y no sea solamente en beneficio de algunos sectores de la sociedad. Al mismo tiempo, deben realizarse diversas transformaciones en las bases estructurales en materia de educación, que permitan efectivamente las innovaciones en el sistema educativo, y no únicamente se realicen como parte de una iconología retomada por las autoridades educativas actuales, en donde según los panelistas, lo que se busca es hacer las “reformas” en el sistema educativo, socializándolo con los interesados, cuando ya existen claramente objetivos y lineamientos preestablecido de acción.

martes, 7 de agosto de 2012

¿El Carnet de la impunidad?



Entrevista con la periodista Silvia Trujillo.
Por Magda García von Hoegen


Recientemente fui invitada a formar parte del consejo de periodistas de la revista Sala de Redacción y fue importante para mí conocer de viva voz, la experiencia de ejercer esta profesión en las coyunturas actuales que vive nuestro país, especialmente en torno a la cobertura del conflicto suscitado a raíz de la propuesta de reforma al magisterio como carrera a nivel superior, con duración de cinco años, llevada adelante por el actual gobierno. Me llamó mucho la atención un comentario sobre la vivencia que tuvo la periodista e investigadora, Silvia Trujillo, quien en días previos quiso presenciar en carne propia los hechos, para percatarse de la forma en que los medios de información estaban cubriendo este proceso, las voces presentadas y también las acalladas.

En una de las jornadas de manifestaciones del estudiantado, ella portaba su carnet de periodista. Al percatarse un estudiante de ello y de los otros reporteros presentes, les gritó: “¡ustedes son unos vendidos!”. Quise indagar sobre ello y contacté a Silvia para conocer de primera mano su experiencia. A continuación incluyo su relato y análisis sobre esta vivencia de ella como comunicadora e investigadora y como mujer que se ha identificado profundamente con la realidad de este país. Esta fue nuestra conversación:

Como periodista que presenció un momento álgido del conflicto por el rechazo a las reformas al magisterio ¿cómo percibiste la reacción de las y los estudiantes ante los medios de comunicación que cubrían la noticia?


Inicialmente, quiero aclarar que me interesé por lo que estaba pasando con el conflicto entre las y los estudiantes de las escuelas normales porque había estado monitoreando el contenido de los medios y no me convencía la manera como estaban reportando los hechos; es decir, no se estaba informando de manera profunda lo que ellos y ellas estaban reclamando y sí aparecía un peso importante de lo que decían  las autoridades, sus juicios sobre el estudiantado. Si tú sigues las publicaciones, encontrarás que hubo muy poca información en este sentido hasta que sucedieron los hechos en el parque de la Industria. Recién ahí, cuando el conflicto llega a su punto más álgido, deciden algunos, dar a conocer las reivindicaciones y los argumentos que estaban sosteniendo.  Por eso me acerqué en dos oportunidades para ser testiga de lo que  estaba pasando y poder conocer qué estaba sucediendo, una en la entrega del Instituto Aqueche y otra a la marcha que protagonizaron las y los normalistas el 5 de julio de 2012. Debo decirte que movió más mi espíritu de investigadora que el de comunicadora. Claro, si tenemos en cuenta aquel mandato que el periodismo debería ser siempre de investigación… pues estaba siguiendo esa premisa.

En relación con tu pregunta me gustaría resaltar, en primer lugar que este proceso me ha hecho reflexionar sobre los liderazgos de nuevo tipo que pueden estar surgiendo: gente más joven, menos nutrida de enconos históricos, con posiciones más horizontales y se constata, por ejemplo,  en las nuevas maneras de entender la representación ya que se han planteado nuevos mecanismos de toma de decisiones y nuevas reivindicaciones que han trascendido las necesidades prácticas. De hecho, el reclamo a los medios podría estar estrechamente vinculado a la comprensión de estos como actores importantes en la conformación de la agenda pública.  En los dos hechos en los cuales estuve presente,  las y los estudiantes le demandan a los medios de comunicación “que digan la verdad”, que dejen de informar de forma parcializada,  ya que esto contribuye a que exista una percepción del estudiantado como delincuentes e incluso criminales. Pienso que estas demandas son reivindicaciones atinadas,  ya que como comentaba previamente, la mayoría de los medios otorgaron pocos o nulos espacios para la difusión de los discursos del estudiantado y sus familiares; pero tampoco han cedido espacios para otras voces que también se manifestaron en contra, ya sea del contenido como de la forma como se quiere imponer la reforma educativa que impulsa el ministerio de educación, tales como académicos y hasta colegios privados.

Esto explica por qué grupos de protesta social han comenzado a desarrollar acciones de hostilidad frente a las y los reporteros, a quienes acusan de  parcialidad, de “traición a los intereses estudiantiles” y hasta de ser “orejas” del gobierno.
Claro, lo que habrá que investigar con mayor profundidad es si estas reivindicaciones hacia los medios han surgido de un debate colectivo sobre su rol e importancia o son simplemente la reacción ante una cobertura que consideran injusta.


Foto de Vykhla Chinche

Supe que al llegar a cubrir los hechos,  tenías tu carnet de periodista, ¿eso hacía alguna diferencia?


Pues resultó muy “shockeante” para mí porque yo no suelo utilizarlo, pero esos días lo portaba, sobre todo para evitar la posible hostilidad policial y estando en uno de los eventos, alguien, que en ese caso no fue estudiante, me dijo “ese es el carnet de la impunidad”. Esa afirmación me dejó pensando, porque efectivamente era la constatación empírica irrefutable de cómo las personas estaban expresando su sentir sobre los medios de comunicación a quienes estaban percibiendo como parciales y al servicio de los funcionarios de turno. Sin embargo a partir de ese incidente es posible cuestionarse, por ejemplo, ¿Quiénes toman las decisiones sobre los temas y enfoques que se publican? Porque muchos de ellos y ellas quizás coincidan con la línea editorial del medio para el cual trabajan; pero es posible  que otros cumplan con la misión de reportar y sí respeten el equilibrio de las fuentes; pero al llegar a las redacciones, la decisión sobre qué se publica o no, no les corresponde.


A tu juicio ¿cómo se ha manejado el equilibrio de las voces en la cobertura del conflicto por la reforma al magisterio?


Se encuentra un grave desequilibrio a favor de las y los funcionarios y empleados públicos y de sectores afines. Pero lo preocupante, además, es que al desequilibrio se sumó una fuerte carga de prejuicios donde se puede constatar que a la hora de citar a las y los estudiantes, en lugar de ser consultados para conocer sus motivos y propuesta, se los catalogaba como violentos, incapaces de tomar decisiones por sí mismos y por lo tanto, como gente manipulada por  otras personas. Por tanto, si pensamos en la capacidad que los medios tienen para incidir en la manera como las sociedades evalúan los hechos, estamos ante la presencia de medios que reproducen discursos adultocéntricos que, criminalizan a las y los jóvenes. 


¿Qué manejo se ha dado a esta información en términos de ética periodística?


Al encuentro nacional de periodistas que impulsó el centro Civitas hace unos días, llegó Sergio Ocampo, un periodista e investigador colombiano, quien planteó que hoy en día las y los periodistas tienen la obligación ética de decir la verdad porque de esa manera se contribuye al bien colectivo. Agregó que lo que existe en muchos casos por pereza, por miedo o por acomodamiento, es el periodismo militante, es decir aquel que claramente apuesta por una manera de entender el mundo. Agregaba  Ocampo en aquel momento que “los periodistas no estamos para sacar adelante proyectos ideológicos”. A partir de eso podríamos preguntarnos si este tipo de cobertura que te comentaba no es precisamente expresión de este tipo de periodismo, donde no sólo no hay una implementación responsable de la libertad de expresión, sino que se defiende un proyecto ideológico sin poner en evidencia las otras maneras de entender el mundo. Si entendemos que existen principios universales del buen periodismo, que debe existir multiplicidad y representatividad de las fuentes que se utilizan, que tiene que haber transparencia y equilibrio en las coberturas, entonces cabe preguntarnos ¿qué tipo de periodismo es el que nos ofrecen los medios masivos en Guatemala?

¿Qué tanta independencia tienen las y los periodistas para dar cobertura objetiva a hechos como este?


Yo creo poco en esto de la objetividad o neutralidad, es decir si tú analizas como los medios deciden qué hechos priorizar y cuáles no, en dónde ubican ciertos hechos periodísticos; también el discernir qué se considera información y que no, entonces sabemos que la supuesta neutralidad u objetividad no existe, y hay una gran corriente de pensamiento que subyace a todo esto. Pero intentando dar respuesta a tu pregunta creo que las y los reporteros están atados a las agendas editoriales de los medios para los cuales trabajan. Yo me cuestiono, por ejemplo, ¿qué correlación de fuerzas tienen ellos y ellas para defender una posición distinta a la del medio? También es importante reconocer que otros, por acomodamiento, ni se lo cuestionan; repiten esas recetas  de informar. Aunque piensen distinto, repiten lógicas por temor a quedarse sin empleo; en algunos casos seguramente se produce censura y autocensura; pero, como te decía previamente, esta coyuntura nos deja planteadas un sinnúmero de inquietudes que es necesario investigar. Por ejemplo si tú analizas los salarios y las condiciones de seguridad en las que trabajan las y los periodistas, te encuentras con un panorama bastante riesgoso, perciben ingresos económicos menores a los establecidos en la ley y deben trabajar durante largas jornadas;  no gozan de seguros (médicos y de vida) y sufren, además, presiones de políticos, de caciques locales y del crimen organizado. En ese contexto ¿Qué autonomía y espíritu crítico se puede sostener?


¿Qué intereses se están favoreciendo en la difusión de este conflicto?


Pues como te decía previamente, en términos de peso en agenda hubo un claro desbalance a favor de la posición del Ministerio de Educación. Cabe preguntarse al respecto ¿Cuánto informaron los medios sobre la posición que defienden los estudiantes? ¿Nos han informado los motivos por los cuales ellos y ellas se refieren a este proceso como privatizador? ¿Cinco años en la universidad resuelven el problema de la mala calidad en la educación?

Luego de un espacio de silencio respecto a este tema en los medios de comunicación, la Ministra de Educación, Chyntia del Aguila, anunció ayer 6 de agosto en conferencia de prensa, que en los próximos días se dará a conocer la nueva propuesta a la reforma de la carrera del magisterio, tomando en cuenta lo discutido en las mesas de diálogo con estudiantes, padres y madres de familia y representantes de organizaciones.

 A la luz de experiencias como las de Silvia Trujillo, será importante analizar la cobertura de los medios de información hacia el tema en su siguiente fase. Es importante como ciudadanos y ciudadanas, mantenernos vigilantes, formarnos nuestro propio criterio y tener una visión crítica al respecto. Esto nos permitirá acrecentar el ejercicio de una ciudadanía plena y no quedarnos con “la punta del iceberg” que muchas veces es lo que nos llega a través de las noticias.

domingo, 5 de agosto de 2012

Investigadores del IEH participarán en congreso de historia


Historia

Tres investigadores del Programa de estudios sobre la historia de Guatemala y el IEH participarán en el IX Congreso Centroamericano de Historia convocado por la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas. El evento se llevará a cabo en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, México del 6 al 10 de agosto. 

Este congreso representa uno de los espacios de intercambio de conocimiento interdisciplinario con que cuenta la comunidad académica de la región. Tendrá la presencia de expositores de distintas especialidades con incidencia en la historia.

Ricardo Sáenz de Tejada coordinará la mesa de trabajo "Guatemala: Luchas sociales y levantamientos campesinos en la segunda mitad del siglo XX" el jueves 09.  En la misma fecha, Leticia González S. presentará “Más allá de la montaña: la región Ixil” en la mesa Luchas sociales y levantamientos campesinos en la segunda mitad del siglo XX. El viernes 10, Luis Pedro Taracena participará con la ponencia “¿Guerra estatal o guerra de ciudades?: movilización militar, recaudación y discurso político” en la mesa Guerra Federal 1826-1829.

Contacto:
xicongresocentroamericano@unicach.mx

jueves, 2 de agosto de 2012

CUERPO HUMANO VS TECNOLOGÍA



Por: Winifred Valdez
IEH
Julio 2012

Despertamos gracias a la alarma de nuestro teléfono celular, trabajamos horas sentados frente a nuestro computador en el trabajo, probablemente tomamos notas de clase en nuestra laptop y realizamos tareas y proyectos. Gran parte del día utilizamos audífonos con nuestra música favorita sonando a un alto volumen. Compartimos diversos documentos, imágenes y canciones a través de internet con distintos aparatos tecnológicos. Si usted está leyendo este texto, será porque desde una computadora ingresó a la página de brújula para revisar distintos artículos.

Sin duda uno de los grandes avances que ha alcanzado el ser humano es el desarrollo tecnológico. Las distintas profesiones han cambiado vertiginosamente,  por la incorporación de distintos mecanismos que facilitan el trabajo. El individuo post moderno se desenvuelve en un mundo tecnológico. Eliezer Geisler (2001:288), lo describe como el homo technicus. “El homo technicus es una noción compleja que incluye los beneficios de la ciencia y la tecnología, junto con las consecuencias sociales y psicológicas negativas.”

Esta persona se mueve en un ambiente complejo y sofisticado, pero es dependiente de la ciencia y tecnología para su desempeño diario, pues ha incorporado estos artefactos externos a cada acción que realiza. ¿Cuántas personas regresan por su laptop o celular al haberlo olvidado, pero pueden olvidar comer o descansar al utilizar estas máquinas? El apagón nacional que vivió Guatemala en marzo de este año causo caos. Prensalibre.com (2012) indicó que ocurrieron distintos accidentes vehiculares por la falta de funcionamiento de semáforos. El Hospital Roosevelt mantuvo áreas completas apagadas, a excepción de intensivo y quirófanos. En los centros comerciales personas quedaron atrapadas en elevadores y dentro de tiendas por falta del scanner de seguridad. Deguate.com (2012) aseguró que el apagón causo daños en el 90% del territorio y el sector privado sufrió una pérdida de Q270 millones por la pausa de actividades. No por estos motivos la tecnología adquiere un carácter negativo y hay que desecharla. Pero es necesario re aprender su función y no depender de ella para toda acción que se realiza.

Existen grandes avances tecnológicos que han incrementado las posibilidades de vida. La tecnología para la salud es sorprendente. El detalle para trabajar el cuerpo humano y restaurarlo para desarrollar una vida completa es indudable; pero la tecnología desarrollada para el entretenimiento diario entra en conflicto con la tecnología para la salud, porque existe un uso inadecuado de estos aparatos, dañando el cuerpo humano de grandes maneras. Mientras la tecnología para la salud sana el cuerpo, la tecnología para el entretenimiento lo vuelve vulnerable a nuevas enfermedades. Además del uso desmedido de los aparatos, el homo techinicus se encuentra en un estado de inconsciencia frente a las necesidades del cuerpo y nota estas señales hasta que existe una molestia severa y se ha extendido el síndrome.

Distintas enfermedades se desligan del uso de la tecnología, a continuación una lista de las más comunes:
·         Síndrome del computador: el ojo humano parpadea de 16 a 20 veces por minuto, frente a la pantalla lo hace solo 6 veces. Esto causa cansancio, dolor de cabeza, tensión ocular, vista doble, etc.
·         Síndrome del túnel carpiano: la cantidad de clicks y movimientos diarios por el uso del mouse causa gran presión en uno de los nervios de la muñeca que controla la función del pulgar y dedos, a excepción del meñique. Causa dolor, adormecimiento y a niveles muy altos, perdida de la sensibilidad en la mano.
·         Síndrome de la Vibración Fantasma El Doctor Steven Conway de la Asociación Americana de Fisioterapia (ACA en sus siglas en inglés) indica que estos problemas físicos junto con la adicción a los teléfonos móviles va en incremento. El estar pendientes de la vibración hace que las personas estén propensas a sentir vibraciones inexistentes.
·         El codo de celular, síndrome de pulgar de blackberry y problemas musculares de cuello: Estos son provocados por el uso excesivo de aparatos celulares y reproductores mp3. El tener la cabeza direccionada hacia la pantalla del teléfono celular o el reproductor mp3 por un prolongado tiempo, causa problemas de cuello. El uso de los pulgares para textos y navegación por estos aparatos y la mala postura de los brazos tiene como consecuencia hormigueo, dolor y debilidad, de acuerdo con el Dr. Peter Evans, director de The Hand and Upper Extremity Center en la Clínica de Cleveland.
·         Pérdida de la audición: el uso de audífonos por horas y al volumen más alto causa que las personas pierdan o disminuyan su nivel de audición.

Este año en mi grupo de amistades más cercanas, tres de cinco personas hemos sido diagnosticadas con síndrome del túnel carpiano. Una trabaja como recepcionista y desarrolló el síndrome por lo que fue necesario un inmovilizador en el brazo derecho. La segunda es periodista para cadena radial FGER y tuvo inmovilizados ambos brazos, además de tomar medicamento para el dolor y adormecimiento. Yo misma tengo principios del síndrome, afortunadamente no he necesitado inmovilizador, pero sí he tenido que cambiar posturas y tomar descansos al trabajar frente al computador en la oficina y en casa.

Se podría enlistar un sinfín de nuevas enfermedades y los ejercicios necesarios para evitarlas, ¿pero será realmente esta la solución adecuada? Tal vez es necesario poner atención al cuerpo más a menudo, tratarlo con cuidado, atender a las distintas señales de molestia leve para prevenir  síntomas agudos de  estas nuevas dolencias relacionadas a la tecnología. Más que precaución, es necesario responder a la sabiduría que el cuerpo transmite. No hay que servirse del cuerpo, hay que convivir con él  y aprovechar su magnífico funcionamiento.




Bibliografía

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